Cómo cuidar la suspensión delantera de tu bici de montaña

Las suspensiones de una bicicleta de montaña sin duda son muy importantes para tener un mejor desempeño en las bajadas. Es por ello que cuidarlas es parte esencial para que tengan un correcto funcionamiento.

Revisa la horquilla antes de cada salida

Antes de cada rodada debes revisar la horquilla de tu bicicleta. Así comprobarás que todas sus piezas se encuentren funcionando y podrías incluso darte cuenta si alguna pieza, sobre todo las tapas, se encuentran en su lugar y bien fijas. Es muy molesto perder la tapas y más si son de controles, puesto que casi no hay repuestos o salen muy costosos.

Limpia las barras

Antes de darle uso a tu bicicleta, debemos de procurar quitarle el polvo y suciedad que pueda estar pegado en las barras de tu suspensión. Así evitaremos que en el muelle de la suspensión se introduzca por debajo de los retenes elementos que puedan dañar el funcionamiento de tu suspensión.

Te recomendamos usar un paño o toalla desechable húmedo, sin ningún tipo de producto que pueda desgastar los componentes de goma y plástico de los retenes.
Haciendo esto cada salida evitaremos el desgaste por fricción y la suspensión trabajara como debe ser.

Ten cuidado cuando laves la bici con agua a presión

Si acostumbras a lavar tu bicicleta con agua a presión debes tener mucho cuidado en cómo apuntar la pistola sobre algunas piezas de tu bicicleta.
Jamás apuntes directamente a los retenes de la horquilla, ya que este componente es el que evita pasar polvo dentro de las botellas; mantiene el aceite y el sistema de amortiguación aislado. Si tú le disparas directamente a esa zona estarás introduciendo tanto agua como partículas de polvo y suciedad  y esto puede ser un asesino silencioso para tu horquilla.

La mejor forma de limpiarlo es con un trapo húmedo o con un chorro de agua sin presión.

Bici de Montaña enlodada

Utiliza un guardabarros

Te recomendamos usar un guardabarro sencillo, que a diferencia de las salpicaderas dobles o de plástico rígido, el guardabarro sencillo no nos va a estorbar y tampoco nos va a doler mucho si se nos llega a romper en la práctica.
El guarda barro sencillo evitará que el lodo que tiene la llanta sea proyectado a las barras y así evitar posibles raspones o golpes directos que podrían afectar en su funcionamiento.

Protege las botellas de tu horquilla

Aunque las botellas de la horquilla son muy resistentes, son las primeras que reciben los daños en la mayoría de las caídas. Para que siempre luzca como nueva te recomendamos usar una mica plástica protectora que conservará en mejores condiciones la pintura de las botellas y podrás siempre ver tu bicicleta como nueva.

Protege del intemperie a tu bicicleta

Cuando tenemos la necesidad de dejar o guardar la bicicleta por motivos personales o accidentes. Hay que considerar el lugar donde la vamos a guardar. Dejar la bicicleta a la intemperie le hará mucho daño a todos los componentes, cuadro y obvio a tu horquilla.
Te recomendamos dejarla en un lugar interior, que no tenga humedad. Pero sí no te hes posible. Procura que el espacio donde la guardes tenga techo y lo mejor es conseguir una lona o funda para cubrir tu bicicleta de los daños ambientales.


Sí tienes guardada tu bicicleta debes considerar de vez en cuando, usar las suspensiones de tu bicicleta en especial la horquilla. Esto es para mantener lubricado su sistema y que tenga menos probabilidades de fallar para cuando reactives su uso.

Dale mantenimiento regularmente

El mantenimiento se recomienda cada 150 horas de uso sí es de uso frecuente, o cada 6 meses o cada año si no la ocupas mucho. Este mantenimiento lo debe dar un profesional en suspensiones.

No todos los talleres mecánicos tienen un especialista en suspensiones. Por ello es necesario que consigas un taller en donde sí puedan hacerlo o incluso un taller especializado en suspensiones solamente.

También cabe aclarar que cuando llevamos nuestra bicicleta a un servicio básico, este servicio no incluye el mantenimiento a nuestra horquilla. Así que no hay que pensar que sí le hacemos un servicio básico la suspensión no lo necesita.

En el mantenimiento profesional se le hace limpieza a los componentes interiores y se cambia el aceite y en caso de ser necesario se cambian los empaques u otro sistema que podría estar dañado.

No lubriques las barras de la suspensión

No es necesario que le eches aceite en las barras. Las horquillas tienen su propio aceite para suspensiones y este se encuentra dentro de las botellas. Es el único aceite que necesitan.

Ten cuidado de no raspar ni golpear las barras

Las barras al estar expuestas sufren de primera mano la mayoría de los golpes o arañazos durante nuestras rodadas en montaña. Por ello debemos tener el mayor cuidado para que estas sufran menores daños. Y al término de la rodada comprobar bajo una observación rápida que las barras no tengan ningún raspón grave. Si no la revisamos es posible que a través de eso golpe se introduzca la suciedad al sistema interior y nuestra suspensión empiece a fallar.

Con estos tips estás listo para tener tu horquilla en las mejores condiciones posibles e incluso podrás venderla a mejor precio.