En este artículo aprenderás los factores que intervienen y cómo determinar la presión adecuada para el inflado de tus cubiertas.
Beneficios de usar la presión adecuada
Una de las ventajas principales de hinchar los neumáticos de la bicicleta a la presión correcta, y quizá la más conocida, es que la bicicleta será más rápida. Esto se debe a que presentará una menor resistencia al rodamiento.
Sin embargo este no es el único beneficio. Además, una presión adecuada disminuye considerablemente el riesgo de pinchaduras y te brinda una conducción más precisa y cómoda. Dos factores, también determinantes para mejorar el desempeño de tu bicicleta.
Determina la presión adecuada de tus cubiertas
Un buen punto de partida para determinar la presión adecuada de las cubiertas será tomar en cuenta las presiones, máximas y mínimas recomendadas. Estas presiones, generalmente las encontrarás marcadas en los costados de tus cubiertas. Como regla general, los neumáticos más anchos suelen usar presiones más bajas y los más angostos usarán presiones más altas.
Por ejemplo, las cubiertas de MTB, que son anchas, suelen usar presiones de entre 25 a 30 PSI. Cubiertas intermedias, comunes en bicicletas híbridas y bicicletas de gravel, requieren entre 40 y 70 PSI. Los rodados más angostos, comunes en bicicletas de ruta, suelen recomendar presiones de 80 a 130 PSI. Los neumáticos con diámetros muy pequeños, como los que se encuentran en bicicletas plegables, también requieren una presión más alta.
Relación entre el peso y la presión de las ruedas
Existe una relación entre la presión y el peso del ciclista. Una presión de inflado adecuada dependerá de la carga ejercida sobre el neumático. Esta carga se refiere al peso combinado entre la bicicleta, el ciclista y cualquier equipaje. Entre más pesado sea el ciclista, el neumático requerirá una presión más elevada.
En términos generales, por cada kilogramo adicional que el neumático debe transportar en términos de peso total, la presión de los neumáticos debe aumentarse en 1%. Ojo, es porcentaje no 1 PSI.
Ya que regularmente nuestro peso no se divide, por partes iguales, entre las llantas trasera y delantera, hay quienes recomiendan utilizar diferente presión en cada una. Generalmente el 60% de nuestro peso lo carga la rueda trasera, por lo que puedes probar una presión mayor en esta rueda.
Regula la presión según las condiciones del camino
Si bien es correcta la teoría que dice que a mayor presión, la cubierta generará menor resistencia. Esta situación es 100% cierta solamente en una superficie perfectamente lisa. En la realidad los caminos lisos y sin imperfecciones son cosa poco frecuente.
Tomando esto en cuenta, podemos decir que la presión de aire adecuada es aquella que permite a la cubierta absorber las vibraciones del camino. Al absorber las vibraciones la, la rueda resultará más rápida y el trayecto será más cómodo.
Si la presión es demasiado baja, sentirás la bicicleta pesada al pedalear. Por otro lado, si puedes sentir cada imperfección del camino, generando incomodidad, será señal de que la presión es demasiado elevada.
Por ejemplo, en pavimento en buen estado, tus cubiertas pueden sentirse bien a 100 PSI, pero si el pavimento es irregular, puedes rodar más rápido a 90 PSI.
Lo mismo aplica si eres un ciclista de montaña. Mientras tu bicicleta puede sentirse muy bien en la carretera con 40 PSI, al adentrarte en los senderos podría sentirse mejor a 30 PSI, por ejemplo. Al pedalear en terrenos sueltos, una presión más baja ayuda a mejorar la tracción.
Mantén una presión adecuada en cada rodada
No basta con encontrar la presión adecuada, inflar el neumático y listo, nos olvidamos. Siempre debes estar al pendiente de la presión, ya que no es raro que se pierda algo de presión de forma natural.
Cualquier llanta, ya sea tubeless o un neumático con cámara, todos pierden aire. Una llanta puede perder, desde unas pocas libras a la semana, o hasta cantidades considerables en una sola noche. Esto dependerá de varios factores que van desde pequeños pinchazos hasta el desgaste del material o ajuste entre el aro y la cubierta (en caso de las cubiertas tubeless).
Entre mayor sea la presión de un neumático, este tiende a perder aire más rápido. Otros factores como temperaturas bajas también pueden acelerar la perdida de aire.
Por estas y otras razones, es importante desarrollar el hábito de revisar periódicamente la presión de tus neumáticos.
Recomendaciones
Hazte de una buena bomba de aire
Una bomba de aire (preferentemente de piso) te servirá para mantener el nivel de presión recomendado para tus neumáticos. Y no obstante que cualquiera te servirá, hay que tener en cuenta que no todas las bombas de aire son iguales, algunos modelos harán que el trabajo sea más preciso y sencillo.
Bomba Topeak Joeblow Sport III – nuestra favorita
Revisa la presión de tus ruedas periódicamente
Como ya se mencionó, es recomendable revisar la presión de los neumáticos de tu bici antes de cada salida. Vale la pena revisarla al menos una vez por semana. Lo importante es crearnos el hábito de los chequeos periódicos de la presión de nuestras ruedas.
Si reparaste una cámara revísala al día siguiente
Siempre que repares un pinchazo y antes de montar de nuevo el neumático, revisa que el parche no permita escapar aire y asegúrate que el objeto que provocó la perforación no permanezca alojado en la cubierta.
También será oportuno que al día siguiente de efectuada la reparación, te cerciores de que no haya fuga de aire por la reparación.
Si cambias cubiertas reajusta tu presión ideal
Ten en cuenta que si vas o has cambiado de cubierta, será necesario que realices un ajuste de la presión. Considera todos los factores que se han revisado, el ancho de la llanta, tu peso, condiciones del camino y climáticas en las que usarás la llanta.
Ahora sí, ya tienes las bases para encontrar la presión adecuada para las ruedas de tu bicicleta. Recuerda cada persona es diferente y usa la bicicleta en diferentes condiciones. Lo que le funcione a otra persona, no necesariamente funcionará para ti. Así que experimenta.