Todo ciclista urbano quiere hacer todo en la bicicleta. Vamos al trabajo en bicicleta, vamos a la escuela en bicicleta, vamos al mercado en bicicleta y hasta hay quienes se cambian de casa en bicicleta. No hay día en que el ciclista urbano no transporte algo consigo.
En un principio uno puede imaginarse que el ir al mercado en su bicicleta es una tarea simple. Basta con comprar sólo lo necesario para poder regresar a casa con dos bolsas, una en cada lado del manubrio.
Desde la primer pedaleada nos damos cuenta de que el trayecto no será tan sencillo como lo imaginábamos. Con el mínimo movimiento del manubrio las bolsas comienzan a balancearse de un lado para otro haciendo que perdamos el control hasta terminar por estrellarnos con un poste o un carro estacionado en el camino. Después de este incidente bochornoso decidimos equiparnos para la carga.
1. En una mochila
La primera opción es conseguirnos una mochila lo suficientemente grande para la carga. Esta es una buena alternativa cuando se trata de trayectos cortos y la carga no es muy voluminosa ni pesada. Es práctica, no necesitamos hacer ninguna adaptación a la bicicleta y existe una gran variedad de modelos y estilos.
Una desventaja de la mochila es que al llegar a tu destino es muy probable que termines con una marca de sudor en la espalda o con una franja atravesando tu torso si se trata una mochila mensajera. Además, la mochila esta limitada en las dimensiones de la cargo, además de que si el peso es considerable se dificulta un poco el maniobrar.

Foto: Thomas Hawk
2. En una parrilla
A medida que uno se va adentrando más en el mundo del ciclismo urbano se da cuenta que la carga es parte de la vida cotidiana y que cada vez queremos llevar más. En esta etapa es cuando te das cuenta que la parrilla, que de niño te hacía parecer ñoño, se convierte en parte indispensable de la bici.
Las parrillas son bastante versátiles, sobre todo si estas equipado con un juego de cordones elásticos. Hay quienes le adaptan alguna canasta para simplemente echar la carga en ella. Con un poco de ingenio se puede cargar una infinidad de cosas de diferentes tamaños y formas. Un accesorio bastante útil que multiplica las capacidades de las parrillas son las alforjas.
Las desventajas de esta opción es que si tu bicicleta no esta equipada con parrillas tendrás que realizar la inversión, sin embargo te garantizo que tu vida será mucho más fácil.
En cuanto a las alforjas estas hay de diferentes tipos y precios. Algunas son bastante sencillas y no son muy caras y hay otras que son impermeables.

3. En un remolque
Para un día normal esto puede ser suficiente. Sin embargo, de ser necesario podemos transportar mucho más en nuestras bicis. Si las parrillas y alforjas no son suficientes el siguiente paso sería un remolque. Éste puede ser bastante conveniente para esos días de mercado, para llevar el asador a la fiesta, la nueva casa del perro, etc. Las posibilidades son infinitas.

4. En una cargo bike
Ya de plano si lo tuyo es llevar mucha cargar, todos los días, más bien lo que necesitas es una Cargo Bike. Prácticamente te puedes cambiar de casa en una de éstas sin ningún problema. Puedes cargarle libreros, mesas, herramientas y mucho más. Existen diferentes modelos y estilos: long-tail, de carga frontal y de carga trasera. A diferencia de los triciclos, estas son más esbeltas y permiten cargar un volumen considerable mientras maniobras entre el tráfico de la ciudad.

Foto:Rsfrd
Así que ya lo saben, si carga van a llevar más vale estar preparado. Muchas accidentes ocurren precisamente por intentar llevar carga. Uno hace malabares para llevar todo en la bici, lleva unas cosas en la mochila, una bolsa en una mano y en ocasiones esto hace que perdamos el control.