Sabemos que pedalear por la ciudad implica superar diversos obstáculos de manera divertida, cuidadosa y ágil. Pero en ocasiones, lidiar con personas que nos insultan y no respetan las ciclovías ni señalizaciones de tránsito, se convierte en todo un reto. Tal es el caso de algunos automovilistas que suelen ser prepotentes y agresivos.
Como ciclistas, tenemos todos los sentidos puestos en el camino, aunque a veces, podremos toparnos con ciertos conductores gritones. Y para evitar que nos tomen por sorpresa, te compartimos los siguientes consejos para superar una situación difícil de manera inteligente y consciente:
1. Mantente calmado
Después de un incidente, habrá conductores que buscarán la forma de intimidarnos con imponentes camionetas y discursos de superioridad como: “No sabes con quien te metes”. Si es el caso, no sigas su juego, mide tu distancia y no te expongas, porque hay quienes avientan el carro y obstruyen el paso. Te recomendamos siempre dirigirte a ellos con respeto.
2. Dialoga con seguridad
Pararte en medio de la calle podría ocasionar un accidente y alterar el tránsito, es preferible que te orilles. Hay ocasiones en las que el conductor o sus acompañantes muestran agresividad, si es así, dirígete a un sitio iluminado y donde haya más gente, esto contribuirá a que los agresores se calmen.
3. Sé observador
En la mayoría de los casos existen testigos que observan todo, ¡hazlo notorio!, involúcralos con su opinión, la mayoría te apoyará. Tal vez el automovilista no acepte su equivocación, pero tu seguridad y apoyo de los demás disminuirá la posibilidad de inquietarse aún más.
4. Aceptemos nuestras fallas
Si cometemos un error al rodar, lo mejor es aceptar nuestra equivocación y ofrecer una atenta disculpa a los afectados. Aunque no lo creas, una buena actitud evitará posibles agresiones e insultos. Incluso, habrá quien reconozca y agradezca tu responsabilidad.
5. ¡Regrésala!
Un gesto amable nunca es esperado después de insultarnos, por eso, aquellos conductores que nos gritan por cualquier cosa merecen una respuesta, así que la mejor manera de hacerlo es con una sonrisa y un agradable saludo. Ellos se “sacarán de onda” y optarán por quedarse callados.
Si lo que buscamos es promover el uso de la bicicleta, una excelente estrategia es mostrar una actitud positiva y no convertirnos en algo por lo que estamos luchando. Rodemos con una sonrisa y no a la defensiva.
Parecen acciones insignificantes, pero sonreír, desear buen día y saludar, puede cambiar el semblante de muchos conductores, e increíblemente, restarán en gran medida futuras agresiones a otros compañeros ciclistas.
Por eso, te invitamos a transmitir lo emocionante y bondadoso que resulta transportarse en bicicleta, así, resultará más atractivo para los demás y crearemos consciencia sobre su uso.
Vivimos en ciudades de causa y efecto, y tener una buena actitud ciclista dirá a los demás qué pueden esperar de nosotros. Nosotros hacemos el ambiente que nos rodea y recibimos lo que damos.
Si al rodar saludamos a los conductores cordialmente, habrá quienes correspondan a nuestro saludo, otros tal vez piensen que estamos locos, pero esa locura es la necesaria para crear una sinergia de sana convivencia urbana, ¿no lo crees? No olvides que una buena y amable actitud en cada pedaleo traerá buenos resultados.
Gary Fisher, considerado como el padre del ciclismo de montaña, dice: «Quien monta en bici es mi amigo», pero, ¿por qué no compartir nuestra amistad con automovilistas?
Por eso ¡gritemos! Pero de alegría y júbilo en cada pedaleo. ¿Qué esperas?
A veces, el hecho de que algunas personas al volante piensen que la bicicleta es un invento recreativo, frena su entendimiento al hacerles ver que también es un medio de transporte, incluso, creado mucho tiempo antes que el automóvil. Y en este aspecto pondremos manos a la obra, y te diremos cómo en nuestro próximo artículo.