Parece que las cámaras de neumáticos están destinadas a desaparecer en el mundo ciclista, cada vez más ciclistas usamos sistemas tubeless y parece que el siguiente paso es añadir una mousse o inserto antipinchazos para mejorar nuestra experiencia por pistas y caminos de tierra.
El objetivo es proteger nuestros neumáticos contra un tipo de pinchazos, aquellos que vienen dados por una compresión extrema del neumático que al golpear la llanta crea un mordisco en forma de pinchazo.
La mousse antipinchazos está ganando adeptos rápidamente entre los ciclistas de montaña, sobre todo entre las disciplinas de descenso, en donde son omnipresentes, aunque también los competidores de XC (cross-country) han visto los beneficios para evitar mordidas en sus ligeras cubiertas. Hoy día las marcas comienzan a ofrecer opciones de mousse para neumáticos más estrechos dedicados a bicicletas gravel y ciclocross. Tengo la sensación de que irán a más. ¿Acaso será necesario incluirla a la lista de las últimas tendencias en el gravel?
Antes de continuar, aclaramos que para fines de este artículo nos referimos como llanta a lo que en algunos países se conoce como el rin.
¿Qué es una mousse o “insert” y cuál es su origen?
Una mousse puede ser de diversos materiales y tener varios diseños, pero el concepto en todos ellos es el mismo, introducir un sólido blado dentro del neumático, generalmente tubeless, en lugar de sólo aire. Esa mousse que se “inserta” (de aquí la denominación inglesa de “insert”) entre la llanta y el neumático ayuda a proteger el uno del otro ante una compresión fuerte.
Los ciclistas de montaña de descenso sacaron la idea de las motocicletas de todoterreno que utilizan un inserto sólido de goma y espuma, también llamado mousse, que llena el interior del neumático en lugar de aire.
El problema está en que los ciclistas debemos usar nuestras fuerzas para hacer avanzar la bicicleta y esos sistemas de mousse sólido de las motocicletas son pesados y poco prácticos y se convierten en una desventaja porque no se puede variar la presión del neumático según las condiciones o el peso del conjunto ciclista/bicicleta.
No fue hasta la consolidación del sistema tubeless en las bicicletas que, de nuevo, los ciclistas de montaña volvieron a considerar incluir la mousse como una opción que trabajase en conjunto con el líquido sellador para protegerse de más opciones de pinchazo.
Los neumáticos sin cámara son geniales, pero el inserto agrega algo más.
Cuáles son sus beneficios en el gravel
El más obvio es la protección contra pinchazos, pero digamos que no es el único.
Como he dicho antes, la mousse o inserto es un material blando que se coloca entre el neumático y la llanta. Tras un impacto fuerte, el neumático se comprime y esta mousse se interpone para evitar que la llanta reciba daño alguno. La mousse a su vez también protege al neumático de pinchazos provocados por mordeduras contra la llanta. Aunque no tiene efecto alguno con objetos o rocas más afiladas y puntiagudas que provoquen cortes en el neumático.
Por lo tanto, la ventaja de la mousse depende en cierta manera del tipo de terreno por donde se pedalea habitualmente.
Una mousse antipinchazos también aumenta la capacidad de amortiguar las vibraciones por parte del neumático, ya que podremos circular con presiones aún más bajas. La amortiguación de vibraciones, es más importante de lo que solemos considerar los ciclistas de gravel. En el transcurso de una pedalada de 5 a 10 horas, esta cualidad puede tener numerosos beneficios, puesto que nos permite circular más rápidamente por terreno suelto y escarpado y el efecto acumulativo de una mayor amortiguación de vibraciones nos deja menos cansados al final del día.
Según el diseño de la mousse antipinchazo, esta tecnología puede brindar un mayor soporte en la pared lateral del neumático a presiones más bajas. Por ejemplo, CushCore, empuja físicamente contra los costados del neumático, proporcionando mayor soporte a las paredes laterales para que se pueda atacar las curvas con más fuerza a bajas presiones. Esto a su vez permite que la banda de rodadura del neumático se adhiera mejor a la superficie.
Si usas tubeless seguro que te has visto en la situación de que cuando pinchas o pierdes todo el aire el neumático tiende a destalonar. Pues algunos diseños de mousse antipinchazos pueden evitar que esto suceda, puesto que empujan físicamente el talón del neumático contra la llanta.
Cuáles son los puntos débiles del sistema
El principal punto débil de la mousse antipinchazos es el peso. Obviamente, si introducimos un elemento más en el neumático este va a pesar más. Son unos gramos extra añadidos a la masa de rotación de tus ruedas, pero que dependiendo del terreno y tu conducción no serán importantes.
Podrás contrarrestar este incremento de peso buscando un neumático más ligero, y beneficiarte de la protección extra de la mousse. Al menos en los neumáticos para bicicletas de montaña es más sencillo porque hay un mayor rango de pesos que en los neumáticos gravel, en donde el peso entre marcas y modelos está bastante equilibrado. Pero todo gramo cuenta, ¿no?
El otro gran factor a tener en cuenta y que se puede convertir en serio obstáculo es la instalación y extracción del sistema. Aquí depende del diseño del fabricante, de la combinación de neumático y llanta que utilices y como no, de la paciencia y maña del instalador. Deberemos fiarnos de las instrucciones del fabricante y no debería convertirse en un problema real en cuanto cojamos práctica.
Otra desventaja de la mousse, es que en caso de provocar un corte en el neumático, deberemos retirar el inserto para colocar una cámara y tendremos que transportarlo de vuelta con nosotros.
Y por último, el precio. Creo que todavía las mousse están en un rango de precios elevado y a medida que su uso se generalice, el precio debería bajar.
Algunos modelos de mousse para gravel que puedes encontrar en el mercado.
- CushCore Gravel. Cx
- Vittoria Air-Liner Gravel
- Tannus Armour (para uso con cámara)
- Tannus Armour Tubeless
- Tubolight EVO Gravel
Cualquiera que sea el sistema de mousse antipinchazos que acabes comprando, si es que te decides, son el futuro. O debería decir, el presente. Y es que seguro que si todavía dudas sobre la conveniencia del sistema es porque también fuiste escéptico con el tubeless, otra tecnología que generó grandes polémicas pero que ya está más aceptada en el mundo de las bicicletas todoterreno. Por lo tanto, me atrevo a decir que los insertos han venido para quedarse.