Hay placer en los bosques sin hollar, hay éxtasis en las costas solitarias, hay sociedad, donde nadie se inmiscuye, junto al hondo mar, y música en su rugido; no amo menos al hombre, sino más a la naturaleza.
Lord Byron
Con este poema de Lord Byron, comienza la peli Into the Wild. Invitándonos a disfrutar de bosques, desiertos, montañas y mares en soledad. De todos los parques naturales que hemos explorado en Castilla y León, precisamente esto es lo que más nos ha gustado, la ausencia de humanos.
Kilómetros y kilómetros de caminos en medio de la naturaleza sin ver un alma, siendo nuestra ruta favorita entre todas, esta maravillosa aventura que vivimos en la montaña Palentina. Hasta ahora.
Nueva ruta favorita
La propuesta que os traemos en la provincia de Soria, nos ha dejado el corazón repleto y una sonrisa de oreja a oreja. Cuenta con la proporción perfecta entre pistas de grava y algún que otro sendero con cierta dificultad técnica que le pone un poco de salsa picante a la jornada. Además de contener desniveles muy graduales, algunos de los mejores refugios libres que conocemos y parajes protegidos únicos, como el Cañón del Río Lobos o la laguna glaciar de Neila.
Si buscas una ruta gravel inmersiva en la naturaleza y no demasiado dura como podríamos considerar la montaña Palentina, el norte de Soria es nuestra apuesta segura.
Mejor en compañía
Into the Wild comenzaba con la cita de Lord Byron invitando a la soledad, pero termina con esta reflexión de su protagonista, Alex Supertramp: «La felicidad sólo es real cuando es compartida«.
Y no nos viene nada mal, porque esta propuesta puede ser un gran plan de fin de semana para un grupo de amigos, donde los más fuertes podrán apretar en algunos de los tramos de subida, que seguirán siendo muy asumibles para aquellas personas menos preparadas.
En nuestro caso fuimos cuatro ciclistas, Silbia, Raul, Eguzki y yo mismo, todos deportistas pero con capacidades físicas bastante diferentes. Todos disfrutamos como niños de cada kilómetro, sin tener la sensación de ir, unos frenados y otros al límite.
Además, cuenta con refugios libres, amplios y muy cuidados, donde pernoctar y compartir junto al fuego. Momentos en tribu que se quedarán marcados en la memoria para siempre. Encuentra en el planificador de Komoot la mayoría de estos refugios y comentarios de otros usuarios que ya pasamos por ellos.
Etapa 1: Ascenso a la Laguna Negra desde Vinuesa
El ascenso parte desde el pueblo, que cuenta con un pequeño supermercado, restaurantes y otros servicios. Casi todo el tramo se realiza por solitarias pistas entre pinares y arroyos de agua heladora, hasta alcanzar la pequeña carretera asfaltada que desciende del parking de la laguna “Paso de la Serra”.
Dicha pista asfaltada es de única dirección, bajada, por lo que nos veríamos obligados a perder algunos de los metros ascendidos y tomar la carretera designada para subir, sumando 5 kilómetros extra y unos 150 metros de desnivel más en positivo.
Si es temporada baja y no hay tráfico puedes seguir el track en sentido contrario por 3 km con precaución, la pista es ancha y los escasos vehículos circulan a muy baja velocidad.
No obstante, prioriza la seguridad, si sientes que hay tráfico, sube caminando junto a tu bici o directamente haz el rodeo. Estudiando el plano en Komoot se ve muy evidente y no tiene pérdida.
En la base del pico Urbión y sus vertiginosas paredes tapizadas de bosques de pino albar, encontrarás un paraje alpino donde la laguna de origen glaciar ha labrado en la roca un remanso de paz y belleza espectacular. Que la subida no te desaliente a evitar este desvío, merece mucho la pena y es uno de los puntos destacados de la ruta.
Aquí mismo, se encuentra un refugio que invita a pasar la noche, ten en cuenta que está a 1800 metros y dependiendo de la época, el frío puede ser muy intenso.
Siguiendo el recorrido por pista, una vez desciendes de la Laguna Negra y a medio camino del final de la etapa, todavía aguarda una sorpresa. Una corta ruta señalizada, que como sugiere su nombre, transcurre entre enormes pinos centenarios que bien merecen, al menos, que tomes el pequeño desvío que os propongo en el track y disfrutes de la contemplación de estos magníficos seres vivos. Algunos tienen hasta 400 años.
El refugio al final de la etapa, cuenta con una sala sencilla y chimenea. Encontrarás suficiente leña en sus alrededores, pero no hay fuente, por lo que recuerda abastecerte un par de kilómetros antes, en Fuente del Pico.
De hecho, junto a la Fuente del Pico, también puedes encontrar otro refugio libre estupendo. Eso sí, está dentro del bosque y es bastante más sombrío y frío, lo cual puede ser una ventaja si es verano o la temperatura demasiado alta.
Etapa 2: Covaleda
Un descenso vertiginoso por una pista ancha te dejará en Covaleda, donde puedes encontrar servicios como supermercados y bares, una buena oportunidad para hacerte con algún tentempié.
El track atraviesa un pinar sobre una senda poco marcada que desemboca en el campamento juvenil antes llamado Francisco Franco. Construido durante la dictadura, el lugar es realmente interesante y un documento genial de la historia reciente. Merece mucho la pena detenerse y observar los monolitos con tallas de las diferentes promociones que pasaron por allí.
Destaca el arco central con la efigie del dictador y el relieve de un monje y un soldado, ideal de un hombre según la falange española.
El ascenso más duro de la jornada sube primero por pista en muy buen estado seguido por una senda entre arbustos, flores, árboles y grandes rocas de granito que a nosotros personalmente nos encantó. Por muy loco que parezca, por momentos te teletransporta a la sabana africana.
Soria de cine
Siguiendo pistas perfectas, irás pasando por refugios libres tan idílicos que dan ganas de quedarse cada dos por tres, hasta enlazar con la vía verde del Ferrocarril Santander Mediterráneo. Aquí encontrarás unos paneles que nos cuentan la historia de cómo fue la locación para la película “Doctor Zhivago”.
San Leonardo de Yagüe
Cerca de San Leonardo de Yagüe, de donde no te puedes ir sin probar los típicos torreznos de Soria, encaras la entrada al Parque Natural Cañón del Río Lobos. Aprovecha a comprar víveres, pues a partir de aquí ya no hay tiendas.
Cañón del río Lobos
El río de agua cristalina, discurre entre picachos y paredes de roca donde habitan decenas de buitres. Pedaleando en la pradera, junto al cauce, uno se siente en el escenario de un cuento fantástico. Si tienes la oportunidad de conocer el lugar en temporada baja o entre semana y sin turistas, la magia se multiplica.
Castillo de Ucero y refugio de Cubilla
Los últimos kilómetros de esta etapa nos llevan desde la atalaya donde se levanta el castillo de Ucero hasta el mejor refugio libre en el que he estado nunca.
Rubillondo, además de encontrarse (como casi todos en el recorrido), en un lugar privilegiado y tranquilo, está en condiciones perfectas, con ventanas y contraventanas de madera, una gran chimenea, mesa y leña en los alrededores. Todo un chalecito para el fin de semana… una lástima que no tenga fuente cerca, así que ten en cuenta recargar agua en Cubilla, 3 kilómetros antes.
Etapa 3: Hogueras, bosques y gravel
Si vas en grupo y despiertas en un lugar tan acogedor como refugio Cubilla no hay nada como madrugar con los primeros rayos de sol y regalar a tus compañeros una hoguera recién encendida, un desayuno rico y un track repleto de pistas entre pinos y sabinas cargado en el GPS. Te lo hemos dicho, esta ruta entre amigos es perfecta.
Calatañazor
Después de dejar atrás el pueblo escuela recuperado de Abioncillo, una carreterita local te conduce a Calatañazor, que cuenta con una arquitectura bastante interesante y un castillo abierto al público. También es bastante turístico y puedes toparte con un montón de gente visitando el lugar.
Monumento natural de la Fuentona
Podrás acceder al salto de agua por un desvío que te dejamos siguiendo el track, también bastante turístico, pero pensamos que vale la pena. Te sentirás recorriendo de nuevo el Cañón del Río Lobos en miniatura y con una cascada de premio al final.
Sabinares
Tanto antes de la Fuentona, como después, vas a recorrer algunos de los sabinares más importantes de los que se enorgullece la región, como por ejemplo el Sabinar de Calatañazor.
Es uno de estos bosques el que te dará paso a un último pinar y el Embalse de la Cuerda del Pozo sobre el río Duero, de nuevo en Vinuesa.
Soria nos ha sorprendido
Ninguna de las personas del grupo nos esperábamos un territorio tan perfecto para viajar en modo gravel y autosuficiente. Las pistas en buen estado, la infraestructura de refugios, lo preservado del medio ambiente y las dos joyas naturales como son la Laguna Negra y el Cañón del Río Lobos, nos han dejado con ganas de más y no dudamos ni un poco en recomendarte esta aventura de fin de semana.
De 2 a 3 días
Si solo cuentas para rodar con 2 días, por ejemplo sábado y domingo, un planazo puede ser llegar a Vinuesa el viernes por la tarde y disfrutar del pintoresco pueblo, o subir en tu vehículo para contemplar el atardecer en la impresionante Laguna Negra.
Si os decidís por esta opción, os dejamos un track alternativo que enlaza por caminos con la etapa 2, saltándose de esta manera la etapa número 1.
Bicicleta recomendada
Teniendo en cuenta que la mayoría del recorrido es a través de pistas en buen estado, te recomendamos una bici gravel o híbrida montada con un neumático ágil tipo 700 40C, aunque una de BTT rígida no penaliza demasiado, ya que los tramos de carretera no son excesivos.
Fotografía Álvaro Teixeira
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